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Por Uldhrued
#133935
El rodillo español arrasa a Israel en una gran segunda parte

La selección española de baloncesto arrolló a la de Israel en un partido en el que, tras una primera parte bastante floja de los de Sergio Scariolo, el acierto en la segunda de Juan Carlos Navarro y Rudy Fernández guió al equipo hacia una sonrojante derrota para los israelíes.

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Los dos primeros cuartos se los tomaron los internacionales españoles con excesiva relajación y eso permitió a su rival mandar en el marcador merced a su buena defensa y al acierto del nuevo ala-pívot del Caja Laboral Vitoria Lior Eliyahu.

En España, sólo Navarro ofrecía un nivel parecido al suyo y eso, al menos, sirvió para que la desventaja de la selección fuese sólo de dos puntos al descanso (32-34). Sin embargo, todo fue diferente tras el descanso. Nueve puntos seguidos del escolta del Barcelona dispararon a España, que ya no dio opción a su oponente. Un 16-2 de parcial en apenas tres minutos dejaron el choque muy encarrilado (48-36) y Rudy Fernández se sumó a la fiesta para, con un triple sobre la bocina que marcaba el final del cuarto, estirar la renta hasta los 15 puntos (61-46) y cerrar un parcial de 29-12 en este periodo.

La superioridad del equipo de Scariolo se mantuvo también en el último cuarto y Víctor Claver y el propio Rudy aprovecharon estos minutos para brillar en ataque. Así la diferencia se fue ampliando frente a un rival, el dirigido por Svi Sherf, que ofreció la imagen de un bloque entregado y en el que ninguno de los jugadores suplentes fue capaz de anotar un solo punto.
Última edición por Uldhrued el 30 Ago 2009, 23:42, editado 1 vez en total.
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Por Uldhrued
#136035
La selección cierra su preparación para el Eurobasket con una exagerada derrota

España acaba irreconocible

Es el primer amistoso que la selección pierde en cuatro años · El horrible día desde el perímetro (2/11 en triples), en los tiros libres (14/25) y la defensa a Navarro, claves del varapalo · Lituania, muy intensa, se dio un festín

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España experimentó en Vilnius sensaciones que parecían desconocidas. Por primera vez en cuatro años perdió un partido de preparación. No diremos amistoso porque tuvo poco de ello. La selección que llegó invicta a los últimos tres campeonatos no lo hará así al Europeo de Polonia. Lituania, que no ganaba a la ÑBA desde la final del Europeo de Suecia en 2003, se encargó de cercenar una racha de 32 victorias consecutivas en partidos no oficiales. España perdió su aura de invencible. Puede que hasta le venga bien antes de afrontar un campeonato donde, pese a la derrota y a la diferencia, sigue siendo la gran favorita.

Las fotos que los aficionados lituanos se hacían con las estrellas españolas durante el calentamiento fueron una emboscada. Minutos más tarde, su selección planteó un cuerpo a cuerpo que España no dudó en aceptar. Fue un partido sin tregua que nada tuvo que ver con el de hace unas semanas en el Torneo MARCA de Sevilla. Lituania se empleó con todo para limpiar aquella afrenta y satisfacer a su entregada afición. En el Europeo habrá muchas guerras de guerrillas como ésta y conviene irse acostumbrando.

Pese al intercambio de canastas del primer cuarto, los de Scariolo nunca dieron la impresión de dominar. Una sensación extraña en este equipo. Delininkaitis, recién fichado por el Murcia, sacó a pasear su muñeca y dio el mando del partido a Lituania. Sus triples daban alas a los bálticos, que al comienzo del segundo acto se dispararon en el marcador (32-20). Todo lo que España fallaba desde el perímetro, lo metía su enemigo.

Scariolo pidió un tiempo muerto. Sonó David Bisbal y la selección se vino arriba. Pero más que la música tuvo que ver una defensa en zona, los robos de Ricky y un poco de velocidad. Un parcial de 4-16 devolvió la igualdad (36-36, min, 18). El enrachado Delininkaitis abrió una ligera brecha con un triple sobre la bocina que indicaba el descanso (46-40). La pausa no sentó bien a España y de maravilla a Linas Kleiza. El refuerzo estrella del Olympiacos convirtió 10 puntos seguidos y liquidó a la selección en una gran segunda mitad. Además de anotar le dio tiempo de provocar a los españoles y exaltar a las masas. Un arbitraje nada condescendiente acabó por desquiciar a los de Scariolo.

La Roja se encontró 16 puntos abajo (61-45, min. 25). Sin Navarro, anulado casi por completo, sólo Marc y en ocasiones Garbajosa se mostraron firmes. España no se había visto en una semejante desde hacía mucho tiempo. Llull intentó levantar el partido como tantas veces lo hizo con el Madrid, a la carrera. Tampoco resultó. La mayor pájara que se le recuerda a la selección se acentuó en el último cuarto. La renta lituana llegó hasta 25 dolorosos puntos (92-67). Para que eso ocurriera tuvieron que darse una serie de catastróficas desgracias difícilmente repetibles: un mal día en los tiros libres (14/25) y peor aún en los triples (2/16), una defensa blandita, la versión más distorsionada de Navarro, unos árbitros caseros y -que no sirva de excusa- que Pau y Rudy estén vestidos de calle.

Lituania: 94
España: 72
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